Según comentan allegados a los habitantes de la morada, el mismo se habría iniciado dado que un adolescente, antes de meterse a bañar, conectó una estufa en uno de los enchufes de los dormitorios. Esto provocó un desperfecto eléctrico y se desató el fuego de manera descomunal. Al salir del baño, el joven se encontró con una escena dantesca: Las llamas tomaron fuerza en los dormitorios de la casa. Inmediatamente los vecinos quedaron conmocionados y llamaron a los bomberos. Cuando arribó la primera dotación del Destacamento Ezpeleta, las llamas habían tomado ya toda la vivienda.
“A través de la ventana se visualizaba fuego y humo en un piso 7°. Se pidió entonces apoyo de dos cisternas del Cuartel Central, otra del Destacamento y una unidad escalante. Se hizo la evacuación del edificio y procedimos a la extinción, pero hubo pérdidas totales”, informó el Comandante Emilio Restucci, Jefe del Cuerpo Activo de Bombero de Quilmes.
En total trabajaron cinco dotaciones con 25 bomberos durante más de una hora para sofocar las llamas. En efecto, dentro del departamento todo quedó reducido a cenizas. Por otra parte, cabe destacar que pese a la gravedad y peligrosidad del siniestro, no hubo ni bomberos ni civiles afectados o heridos.
Vecinos del complejo habitacional y allegados a los damnificados se encuentran realizando una campaña para ayudar a la familia que reside en el departamento incendiado. Necesitan elementos de todo tipo para reacondicionar la vivienda (elementos de construcción, pintura, cableado y artículos de limpieza) además de indumentaria para adultos y jóvenes, y demás objetos para volver a empezar (muebles, electrodomésticos, colchones, alimentos, etc).
Para colaborar económicamente con la familia, se encuentra a disposición este CBU y alias |