Dicho enfrentamientos ocurrieron cuando un grupo disidente intentó boicotear la presentación de un delegado gremial de Quilmes, Florencio Varela y Berazategui.
Además, trascendió que Damián Vázquez, de la Agrupación Saúl Ubaldini, había convocado a un sorteo para la asignación de puestos de trabajo en la misma obra, lo que habría intensificado las tensiones en el gremio. La misma se trata de un complejo habitacional en la zona de 47 y 163.
Fue entonces cuando se desató una batalla campal que incluyó tiros, piedras y golpes. De acuerdo a los propios vecinos, se registraron más de 50 disparos.
El enfrentamiento dejó seis heridos, cuatro de ellos miembros de la facción de Florencio Varela. Además, se reportó el ingreso de un herido de bala en el abdomen y pelvis al Hospital Iriarte de Quilmes, que sería miembro de la facción de Quilmes-Berazategui.
La policía acudió al lugar y certificó la presencia de miembros de ambas facciones. Se solicitó apoyo de grupos especiales para contener el conflicto, y se ordenó la elaboración de informes policiales de rigor.