COMO EMPEZO TODO
En la mañana del 8 de febrero provocó un incendio en el domicilio familiar en 28 entre 142 y 142A, que destruyó todas las viviendas del lugar con el saldo de una de sus nietas, de 7 años de edad internada en el Hospital Pedro Goyena, en Caballito, en grave estado. La niña debe enfrentar una nueva intervención y por la cual se está pidiendo 10 dadores de sangre. En tanto, su madre la está acompañando, lo que le impide por el momento hacer la denuncia. Los miembros de la Comisaría 1° son quienes deben dirigirse al lugar para tomársela. Y también son los que deben impulsar la búsqueda y detención de Néstor Contreras, ya que desde el día del incendio en adelante sigue merodeando por el domicilio de sus hijos, lo que puede desencadenar una desgracia peor.
El padre de la niña que se quemó al intentar salvarla a pesar del fuego se encuentra en grave estado en el Hospital del Bicentenario, y también terminó afectado por inhalación del humo otro nieto del sujeto de pocos días de nacido que fue hospitalizado en el Hospital Evita Pueblo de Berazategui. Además de los adultos se encontraban en el lugar 8 menores de entre 1 y 13 años.
Ante el llamado a la policía solo se hizo presente un patrullero que sólo reportó un incendio, no hubo intervención policial ni peritajes sobre el lugar, ni registro de las víctimas, ni intervención judicial en el momento de los hechos. Esta acción de inoperancia e indiferencia tiene un marco de discriminación por ser una familia humilde y de total complicidad de parte de las instituciones que deben intervenir.
El accionar de los vecinos junto a los bomberos logró apagar el incendio y fue la propia familia junto a los vecinos que a pesar del fuego y el humo rompiendo una ventana pudieron rescatar a los menores que habían quedado en la única piecita que quedó en pie. En primera instancia un familiar no conviviente hizo una exposición sobre los hechos de violencia hacia la familia, en la Comisaría 1° de Berazategui ya que las víctimas directas están hospitalizadas y los demás familiares estaban ocupándose de la situación habitacional y la alimentación de los menores
Cuando, a pesar de las amenazas del violento, se presentaron a hacer la denuncia en la mencionada seccional, se negaron a tomársela, tampoco se la tomaron a la madre del joven internado y al padre de la niña hospitalizada.
IMPUNIDAD DE LARGA DATA
Este hombre, es padre de 11 hijos, fue denunciado en el año 1998 en el Juzgado Número 2 de Quilmes, por su propia familia, de violaciones, malos tratos y torturas psicológicas y físicas hacia ellos. En la actualidad aún sigue libre. Les robó su inocencia y destruyó su niñez, lo que le permitió someterlos desde la infancia hasta la fecha, con amenazas de muerte hacia todos ellos y de violar y matar a sus nietos si no lo seguían manteniendo como lo habían hecho desde siempre. Incluso los hacía prostituir y los mandaba a robar.
Cuando se hizo la primera denuncia ese año, él trabajaba en la Municipalidad con contactos dentro de la misma y siempre estaba armado, trabajo del que se lo despide por robo y otros delitos ajenos a las denuncias familiares en las que el municipio jamás se involucró ni hizo nada. La inoperancia de la justicia tampoco hizo nada, dejando a los niños con total desprotección, todo esto lo hizo sentir tan impune durante todos estos años que amenazó en los últimos tiempos a viva voz en el barrio que quería matar a toda su familia, “voy a matarlos a todos” reiteró en varias oportunidades.
Sin embargo, comenzó a haber (algo de) justicia. La Justicia dictó una orden de restricción contra esta bestia. Fue el juez Alejandro Mora quien dictó ese impedimento legal de acercarse a su familia. En la última semana comenzaron a hacer reclamos en la puerta de la fiscalía de 14 y 138 donde el viernes pudieron ser atendidos por el dr. Cristian Granados, a cargo de la UFI 2 (quien investiga el incendio). Él recibió las pruebas suficientes y las declaraciones de testigos que comprometen la situación de Contreras. Las hijas que fueron atendidas por él quedaron con el fiscal a que haya novedades hasta el próximo jueves.
Pero aún así no fue lo suficiente para frenar al chacal éste. Por eso en la madrugada del domingo él mismo tiró un objeto con fuego para volver a incendiar la morada donde viven sus hijos. Sólo un vecino sufrió quemaduras moderadas al intentar ayudar a apagar el fuego. Este hecho hizo tomar más coraje a sus familiares que tuvieron que volver a protestar en las puertas de la fiscalía, exigiendo ser atendidos nuevamente por Granados y por su par de la UFI 4, la dra. Silvia Borrone (quien podría quedar a cargo de la investigación). Solo recibieron a una de las hijas para que pueda declarar lo sucedido este fin de semana. Pero esperaron ser recibidos por los fiscales mencionados, sin éxito.
Este es un caso donde un "hombre" puede llevarse todo por el delante ante el silencio cómplice de la justicia, dejando desamparada y atemorizada a toda una familia que padeció un martirio durante más de 20 años perpetrado por éste monstruo.