Ni siquiera te podés dar el lujo de tomarte unas merecidísimas vacaciones, porque el delito no descansa. Carmen Terrazzino, se volvió de Miramar este martes porque se enteró, por medio de su hijo, de que le desvalijaron su casa de Illianes al 1221 entre Uriburu y Derqui. El hecho sucedió en las primeras horas de ese día, y según los vecinos llegaron a ver a una pareja con su nena en su camioneta Ford F-100 blanca esperando a otros ladrones que venían cargando bolsos de la vivienda saqueada. Lamentablemente no quedaron registros fílmicos de estos sujetos ya que se llevaron hasta la computadora de las cámaras de seguridad.
Carmen, en diálogo con EL INQUISIDOR ONLINE, recordó que uno de sus hijos llamó a su marido por el asunto de que no funcionaba el motor del agua. Se puso a revisar y vio que la canilla del baño de arriba estaba abierta. Y agregó “Cuando subió a la planta alta vio mi habitación toda dada vuelta. Las tres habitaciones, un desastre total, las puertas rotas.” Entonces, al ver impresionado de tanto tumulto se puso a investigar por donde ingresaron y vio que la reja del living estaba palanqueada a pesar del grosor de la misma. Terrazzino sospecha que el golpe fue premeditado al notar que actuaron luego de que uno de sus hijos salió de la casa para irse a trabajar. “Esto fue premeditado, porque ya sabían todos los movimientos. Lo más importante es que no hubo ningún herido”.
Los delincuentes se llevaron algunas de sus pertenencias como cadenitas de oro, dinero y hasta la computadora que registraba y almacenaba las imágenes de las cámaras de seguridad del hogar. Los vecinos le contaron a Carmen que en el horario en que ocurría el hecho vieron circular una camioneta Ford F-100 blanca cuyos ocupantes era una pareja y su hija. También vieron salir a los saqueadores con bolsas donde se encontraba el botín, cargándolas en el rodado.
La denuncia fue radicada en la comisaría Sexta de Ezpeleta, donde el matrimonio se sintió conforme por la atención brindada por el personal policial.
