Todo comenzó con la denuncia de un agente municipal del mencionado municipio del oeste del gran Buenos Aires, quien argumentó haber sido amenazado y secuestrado por L-Gante y un acompañante, en un hecho ocurrido a la salida de un boliche el 27 de mayo pasado. La víctima afirmó que ellos fueron hasta su casa en el barrio Bicentenario de Moreno y no solo lo agredieron a él, sino también a su familia.
“En este contexto se hizo presente su vecino Valenzuela y, mediante amenazas e intimidación con un arma de fuego, los obligó a él y a otra persona subirse a un auto. El músico los privó de la libertad con el objetivo de que hablaran para que no detuvieran a su ‘gente’ [en referencia a los integrantes de la Cumbia 420]”, según explicaron las fuentes judiciales a los medios. La fiscal Alejandra Rodríguez y el ayudante fiscal Ezequiel Freydier, titulares de la UFI N°9 de Gral. Rodríguez, pidieron la detención de Valenzuela el viernes pasado pero la orden de detención fue firmada hoy por el juez de Garantías Gabriel Castro.
Fue así que en la tarde del pasado se realizaron cuatro allanamientos en domicilios vinculados al trapero. Se requisó la casa de su madre Claudia, como así también la vivienda del cantante, en el Country Banco Provincia de Moreno, donde fue hallado y detenido.
En las 9 horas que el personal policial estuvo allí trabajando, se secuestraron su auto BMW y tres armas de juguete, un teléfono celular y el auto en el que se presume que mantuvo cautiva a las dos víctimas.
Alrededor de las 23 partió el móvil que llevaba a Valenzuela hasta la sede de la DDI quilmeña, en Corrientes y Martín Rodríguez. El motivo, que según la justicia alega, es para evitar movimientos por parte de allegados que viven en cercanías de su domicilio y fans. Para las 0.15 arribó al edificio de la brigada. Horas más tarde, vinieron sus padres, que no pudieron entrar a la celda.
A la mañana siguiente, se hizo presente una joven quilmeña de 26 años que forma parte de un club de fans de la zona que intentó entregarle a L-Gante una bolsa con mensajes motivacionales y que en su interior llevaba unas medias con la cara del artista, además de unas vinchas con su nombre y calcomanías. La misma fue entregada más tarde a su abogado, Alejandro Cipolla.El letrado se acercó alrededor de las 10 de la mañana para ver como se encontraba alojado el cantante y como pasó la noche. En diálogo con la prensa, Cipolla aseguró que la fiscalía de la causa está “ensañada” con su cliente y que su detención “es sobre exagerada” y “no tiene sentido”.
L-Gante estaba “esposado” y “tirado en el piso” tras su arresto. “¿Cuál es la peligrosidad que puede hacer L-Gante ante 30 policías para tenerlo esposado desde el primer momento? ¿Y segundo, no dejar ingresar a su abogado?”, cuestionó el abogado.
Luego, acusó a la UFI N°9 de parcialidad, ya que investigó al cantante en una acusación previa por lesiones. “Incluso, esta fiscalía fue denunciada por Elián y por mí en la causa por lesiones”, continuó Cipolla.
Se espera para ver si la situación procesal del máximo referente del RKT seguirá rondando a su favor o en su contra. Por lo tanto, continuaría recluido en la DDI de Quilmes y sólo saldría para declarar ante la fiscalía rodriguense.
