La violeta secuencia, que quedó registrada por cámaras de seguridad privadas, ocurrió a las 22.10 en el cruce de las calles México y Unamuno. La joven víctima iba caminando por allí cuando vio que se acercaban dos sujetos sospechosos en una motocicleta y de inmediato comenzó a correr. Tenía razón: se trataba de ladrones que pretendían asaltarlo y para ello se lanzaron en su persecución.
Más de una cuadra duró el desesperado intento del chico por escapar, trayecto en el cual logró sacarse la mochila y tirarla por encima de una reja hacia el patio delantero de una vivienda. Fue entonces que los malvivientes consiguieron alcanzarlo. Mientras uno se quedó siempre de apoyo en la motocicleta, el otro se encargó de reducir al muchacho picaneándolo en el pecho.
Los destellos que pueden verse en el video dan cuenta de lo siniestro y desmedido del accionar delictivo. Finalmente, tras un nuevo forcejeo, el ladrón consiguió quitarle as pertenencias que el joven aún llevaba en el bolsillo y ambos huyeron raudamente. “El pibe no daba más del dolor en el pecho por la picaneada que le pegaron. ¡Casi lo matan!”, manifestó uno de los vecinos de la zona.
Según relató el hombre, el barrio viene sufriendo una ola de inseguridad y sostuvo que “siempre es la misma moto todos los días”. A raíz de esta situación, hace dos semanas se llevó a cabo una reunión en la Sociedad de Fomento “Amancay”, ubicada a pocas cuadras del lugar del hecho, de la que participaron tanto el titular de la comisaría 9°, el comisario Darío Ares, como representantes de la secretaría de Seguridad del Municipio.
“Dijeron que no había tantos delitos y empecé a mostrarles la cantidad de videos que tenemos de robos, los horarios y que siempre es la misma moto. La última vez el patrullero tardó 20 minutos en llegar. A lo único que se comprometieron fue a poner más patrullas a la hora de salida de la escuela Perpetuo Socorro, que igualmente brillan por su ausencia: los viven robando a los pibes, ni estudiar se puede”, afirmó el vecino.
