[EXCLUSIVO] Hace una semana informamos de un suicidio en una casa de Ezpeleta. El domingo 6 un hombre fue a visitar a una mujer, se encerró en el baño y se apuñaló en el pecho. Fue identificado como Fernando 'Chavo' Chávez (45), y trabajaba de portero en la municipalidad de Quilmes. Hasta ese día se desconocían los motivos de se muerte. Pero en la semana se supo que Chávez estaba siendo buscado tras ser escrachado en redes sociales por abusar sexualmente de sus dos hijastras menores de edad. Hoy ellas tienen 13 y 17 años. El calvario lo vivieron durante siete años, cuando 'Chavo' empezó a salir con la madre de las nenas, residente del barrio Bustillo de Hudson. Según denuncian, a la más chica la toqueteaba, la manoseaba, le daba besos en la boca y llegó a someterla. Mientras que a la más grande la trataba como si fuera su pareja: la vivía abrazando, estaba muy pegado a ella, y le vivía prohibiendo cosas: tener novio, juntarse con amigas, comunicarse con otros familiares, etc. Todo bajo amenaza de dejarlas en la calle a su madre y a ellas y hasta de 'aparecer en un arroyo'. Con el tiempo fueron de a poco perdiendo el miedo, y llegaron a contarle a su madre, pero ella las trató de mentirosas, y minimizó las acusaciones. La relación entre el y la mujer era muy turbulenta, siempre era agredida verbalmente y una vez se separaron porque Chávez tenía una amante. La misma vive en Ezpeleta.
Las chicas contaron a sus parientes de los abusos ante el descreimiento de su progenitora. De ahí comenzaron a vivir con sus tíos paternos, dentro del mismo barrio. Mientras tanto hicieron la denuncia en la Comisaría de la Mujer de Berazategui y escracharon al 'hombre' en redes sociales. Su madre dejó de convivir con sus hijas y espera el resultado de los estudios médicos que se les harán a ellas. Mientras tanto, llegó a decir en un audio que se maten.
Pero quién hizo esto fue el abusador, ya que el sábado desapareció del barrio y el domingo 6 a la tarde fue a ver a su amante a la casa de Santa fe y Derqui donde se suicidó en el baño.
Las chicas se enteraron por un familiar que les contó por teléfono. De ahí esperan a que avance la justicia, más allá de que el acusado ya esté en manos de Satanás. La madre de las adolescentes les echó la culpa de su muerte. Pero aún así, están con la conciencia tranquila de que 'Chavo' no las molestará nunca más.