Un joven falleció electrocutado luego de intentar rescatar a un loro de un árbol, en el límite entre Ranelagh y Plátanos. Según testigos, el ave, un guacamayo se habría escapado de la casa del dueño, un policía, quien le ofreció al muchacho mil pesos para recuperarlo. Al árbol lo cruzaban cables de alta tensión, y cuando el joven de 20 años se trepó para atrapar al loro hizo contacto con el cable, que le dio una descarga eléctrica y le generó un paro cardíaco.
Este suceso tuvo lugar alrededor de las 10.30 en Av. Ranelagh y 313, cuando Cristian Jaure Sampedri (20), estaba en la calle cuando una persona le contó que necesitaba que bajen al guacamayo de un árbol, a varios metros de altura. Le dijo que le daba mil pesos si lo lograba. El hombre le dio una escalera metálica y un fierro para intentar correrlo.
Pero al tocar esos materiales con un cable de alta tensión, hicieron contacto y provocaron una fuerte descarga eléctrica sobre el cuerpo de Cristian. Él cayó, y terminó en el suelo agonizando. Según testigos, pidieron ayuda al dueño del loro y a su pareja, pero minimizaban la situación, y le daban más importancia al rescate del guacamayo, ya que 'les costó $400 mil'. Y se llevaron la escalera.
Llamaron a la ambulancia, pero como tardaba, un vecino llevó a la víctima al hospital Evita Pueblo, pero no resistió y falleció. Cristian vivía a una cuadra y media donde dejó de existir, y dejó en orfandad a un bebé. Mientras tanto, se dice que habrían convocado a los bomberos para intentar bajar al guacamayo, pero los voluntarios no tuvieron éxito.
Tras conocerse la noticia, se registraron incidentes entre familiares del fallecido y el policía, quien prestaría servicios en el Comando de Lanús, el cual había reportado como desaparecido al animal y ofrecido una recompensa de $50 mil para quien lograra recuperarlo.
En su defensa, el acusado habría aseverado que el chico estaba intentando robar cables; pero vecinos y familiares dicen que no fue así, ya que no registra ningún antecedente. Hubo incidentes en la puerta de la casa del efectivo, en 313 casi 371. Habrían intentado ingresar a la casa para hacer justicia por mano propia, pero los efectivos en el lugar lo impidieron. Hubo personas heridas con balas de goma. Más tarde, intentaron con éxito bajar a gomerazos al animal, pero cuando cayó a la superficie lo terminaron sacrificando y se lo dejaron colgado en el portón de la casa de su dueño.