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Una buena noticia para la gente de bien. Un efectivo del UTOI que se encontraba franco de servicio fue atacado en Villa la Florida por dos motochorros que le apuntaron con un arma para robarle la moto. Ante la voz de alto, se produce un tiroteo que termina baleando a ambos anulándoles sus DNI's, mientras que el policía se encuentra ileso.
El hecho sucedió este miércoles cerca de las 19 horas en el cruce de Camino General Belgrano y 855, a dos cuadras de la rotonda de Monteverde, donde un oficial de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) de la Policía Bonaerense estaba detenido en una esquina a bordo de su moto.
De repente, el hombre, que se encontraba de franco e iba vestido de civil, fue interceptado por dos delincuentes en moto que lo amenazaron a punta de pistola para robarle su moto. En consecuencia, el policía se identificó como tal y no dudó en demostrarlo: Abrió fuego contra los ladrones. Realizó cuatro disparos. Dos de ellos alcanzaron a sus atacantes, quienes se dieron a la fuga heridos por la 855.
Pero su huida les duró poco, ya que a medida que gastaban lo poco que quedaba de sus energías, comenzaban a caer como moscas. En el frente de una casa de 871 casi 855 se le apagó la vida al primer maleante, identificado como Alexander Javier Ruiz, alias 'Bebé' (15), quien recibió un disparo en el tórax.
En tanto, su cómplice, identificado como Maximiliano Ramírez, alias 'Papel', avanzó unos metros más hasta la avenida Mosconi, pero no llegó y terminó muriendo en el patio delantero de otra vivienda ubicada en 854 casi 871. Con un impacto de bala en el omóplato, 'Papel' terminó en los brazos de Satanás junto con 'Bebé'.
A la llegada de los agentes y ambulancias del SAME, se constató la muerte de ambos delincuentes, mientras que la verdadera víctima afortunadamente resultó ilesa. Se supo que los ajusticiados circulaban a bordo de una moto robada, con pedido de secuestro activo desde el 8 de febrero. Además, tenían una pistola calibre 22 largo cargada y lista para disparar.
Se hizo presente además la titular de la UFI N°6 de Quilmes, la dra. Mariana Curra Zamaniego, que ordenó distintas pericias complementarias para determinar exactamente cómo ocurrió el hecho. La fiscal usó la cabeza y decidió no tomar ningún temperamento legal contra este buen policía, ya que era lógico: actuó en legítima defensa.
Con respecto a estas lacras que molestaban a la gente honrada, fueron veladas en la noche del jueves en dos diferentes cocherías de la calle 844 y en la mañana siguiente terminaron recluidas a cadena perpetua en la más sofisticada unidad penal de máxima seguridad: el cementerio municipal de Ezpeleta.
