Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 19.25 de este lunes, cuando minutos antes un sujeto andaba tanteando el local, para que luego se acercaran los tres restantes miembros de la banda, que con gorras y armas irrumpieron en el comercio.
Redujeron a sus empleados y a los diez clientes que estaban haciendo sus compras para la cena. En un momento estos individuos le apuntaron en la cabeza a una menor de siete años para que su madre le entregase el teléfono celular.
Además de ese celular, se llevaron otro, además de algo del dinero recaudado y una camioneta marca Jeep de color blanco y huyeron.
El hecho generó conmoción más que nada por el accionar que tuvieron los pistoleros con la chiquita, que quedó en shock y rompió en llanto. 'No sabíamos si el arma estaba cargada o no, o si en realidad era un arma o no. Pero apuntaron a una nena de siete años que salió llorando asustada', contó Silvia, una de las dueñas de la verdulería.
La denuncia quedó radicada en la comisaría 1°.