Una familia oriunda de Quilmes Oeste regresaba de pasar un agradable momento junto a sus amigos cuando dos malvivientes los acecharon para ayudarles todas sus pertenencias. Ocurrió cerca de las 20 del pasado domingo.
Ambos delincuentes estaban armados y sorprendieron a la familia, en la intersección de las calles Andrés Baranda al 3400 cuando volvían de un partido de fútbol.
Entre las víctimas del robo se encontraba un menor de edad. Les apuntaron en el pecho para sacarle los celulares y las carteras. También, se robaron la llave del auto que fue descartada cuadras más adelante y recuperada posteriormente.